Competitividad y problema energético

A pesar de que la electrólisis de la planta de aluminio de San Ciprián es eficiente en consumo de electricidad por tonelada de aluminio producido y relativamente competitiva en otros costes de producción, su competitividad queda lastrada por la ausencia en España de un marco energético competitivo.

Para comprender bien este punto – clave para analizar la situación actual en la que se encuentra la fábrica – conviene explicar porqué es tan crítico el marco energético para la planta de aluminio de San Ciprián.

El coste de energía ha representado el 40% de los costes totales de producción de aluminio primario en los últimos años hasta 2020, porcentaje que se eleva hasta más del 60% en 2021.

En cuanto a la relevancia frente a valor que representa la energía en el negocio, el parámetro reconocido y utilizado para determinar la relevancia en una instalación en particular es la relación entre su consumo eléctrico y su valor añadido bruto. Este parámetro, para la planta de Aluminio de San Ciprián supera de forma incuestionable los mínimos establecidos en la regulación y los de otros sectores. El coste unitario de producción de aluminio derivado de la electricidad se puede estimar de la siguiente forma:

  • Coste de electricidad por tonelada de aluminio (EUR/tAl) = 15 MWh/tAl x Precio eléctrico (EUR/MWh).

Al coste de la energía, se añaden otros costes, como los de alúmina, otras materias primas y los laborales, entre otros.